Antes del paso al capitalismo, la región conocía un bienestar social garantizado. Un informe de las Naciones Unidas dice: "Antes de los años noventa, los equipos sociales en los países de Europa central y oriental y en los países de la CEI eran notablemente buenos. Había una alta seguridad social de base. El empleo de tiempo completo estaba garantizado de por vida. Igual si el ingreso monetario era bajo, era estable y seguro. Muchos bienes de consumo y servicios básicos eran subsidiados y el aprovisionamiento era regular. Había suficiente alimentación, vestido y vivienda. El acceso a la educación y a la salud era gratuito. La pensión estaba asegurada y las personas podían disfrutar de muchas otras formas de protección social". El informe continúa: "Hoy, una educación correcta, una vida sana y una alimentación suficiente no están aseguradas. La tasa de mortalidad aumenta, nuevas epidemias potencialmente destructivas amenazan y tornan la vida (y la sobrevivencia) en un creciente y alarmante peligro".
Consecuencia: ciertos países se despoblan dramáticamente. En Ucrania, la población ha disminuído en 1.2 millones desde 1991. En Rusia, entre 1992 y 1997, la población ha disminuído por 5.7 millones, a pesar de la llegada de 3.7 millones de inmigrantes de países vecinos. Lo que quiere decir que hay 3500 rusos menos por día. Las Naciones Unidas estiman que si la tendencia no se invierte, la población de los antiguos países del Este habrá disminuído en 20% de aquí al 2050: de 307 a 250 millones.
¿Qué piensa la gente?
La población oscila entre la decepción, la resignación y la cólera. Algunos ejemplos.
Polonia salió más indemne de la transición. En este país tan católico, el comunismo no tuvo la vida fácil jamás. Sin embargo, hoy, 44% de los polacos juzgan el periodo del bloque del Este como positivo. 47% estiman que el socialismo es una buena doctrina, que "ha sido mal aplicada". 37% de los polacos incluso hacen una apreciación positiva del partido comunista que estuvo en el poder de 1945 a 1989. 31% están descontentos con este periodo. Sólo el 41% encuentra que el capitalismo es un mejor sistema.
76% de los alemanes del Este estiman que el socialismo es "una buena idea que ha sido mal aplicada" y sólo uno de tres está satisfecho con la forma en que funciona la democracia.
Según una encuesta de 1999, 64% de los rumanos preferían la vida bajo Ceausescu.
En Rusia, Lenin es aún popular. 67% de los rusos emiten una opinión positiva a su sujeto. Sólo el 15% hablan del rol de Lenin en términos negativos.
Hay una multitud de insatisfacciones y el potencial de revolución es grande. Las heridas del pasado están aún frescas y la confusión ideológica es aún grande, pero no está excluído que, en un futuro próximo, se regrese al socialismo, pero esta vez "bien aplicado".
Desde la instauración del capitalismo, Europa del Este parece más y más un país del tercer mundo.
- Un décimo de los habitantes de los antiguos países del Este está subalimentado. En Rusia, es un niño de siete quien sufre de subalimentación crónica.
- Por primera vez desde 50 años, el analfabetismo reapareció.
- La tuberculosis está de nuevo casi tan expandida como en el tercer mundo.
- El número de casos de sífilis era en 1998 en Rusia cuarenta veces más elevado que en 1990.
- La esperanza de vida de los rusos de sexo masculino pasó de 63.8 a 57.7 años entre 1992 1994. En Ucrania disminuyó de 65.7 a 62.3 años.
- Desde 1992, el número de alcohólicos se duplicó en Rusia.
- Por 100 embarazos, hay 60 abortos en Rusia. Consecuencia: 6 millones de mujeres son estériles.
- En Polonia, el número de suicidios aumentó en 25%. En ciertos países de la ex-Unión Soviética, este número se ha incluso doblado.
- El número de delitos, en Bulgaria, es cuatro veces más elevado que en 1989, en Hungría y en la República Checa, se ha triplicado. En Polonia, ha aumentado en 60% el número de muertos, en otros países, ha aumentado hasta el 250%.
- Las Naciones Unidas estiman que el número de muertos en los antiguos países socialistas que se atribuyen a las nuevas enfermedades (fácilmente curables) y a la violencia (guerra), es de 2 millones en los primeros 5 años del paso al capitalismo.